Gove acusa al PCR de antisemitismo: ¡Abajo los mentirosos criminales de guerra conservadores!

El PCR británico ha sido acusado de antisemitismo por el secretario de estado conservador Michael Gove en un intento de encubrir los crímenes del imperialismo británico y su apoyo al genocidio por parte de Israel. ¡Ayúdanos a derrocar a estos hipócritas belicistas en Westminster!

El ministro conservador Michael Gove ha acusado al Partido Comunista Revolucionario (PCR) de antisemitismo en directo en la BBC.

No es casualidad que Gove haya elegido atacarnos ahora. Ayer mismo, la Corte Penal Internacional (CPI) acusó a Israel de crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad, incluyendo el asesinato de civiles.

Incluso para los estándares espurios de un tribunal burgués, los crímenes que Israel está llevando a cabo en Gaza están a la vista de todos.

El gobierno conservador, junto con el resto del “establishment”, es cómplice de este genocidio. Desde 2008, el Estado británico ha autorizado la venta de armas a Israel por un valor de más de 574 millones de libras esterlinas.

Tanto los tories como los laboristas de Starmer han aprovechado cada oportunidad para dar su apoyo incondicional al régimen asesino israelí, incluyendo el envío del ejército y la RAF (Fuerza Aérea Real) como refuerzo, y cortar el financiamiento de la agencia de ayuda de la ONU, UNRWA.

Mientras tanto, todos los medios de comunicación burgueses se han movilizado para fomentar el apoyo al régimen israelí y protegerlo de sus crímenes.

Por lo tanto, el discurso de Gove no es más que una cortina de humo para ocultar el papel de su gobierno -y del resto del “establishment”- en la perpetuación de la matanza israelí en Gaza.

No es el PCR el que debería sentarse en el banquillo de los acusados, sino los imperialistas británicos y su sistema capitalista, que está produciendo los horrores que vemos hoy en Gaza.

Hipocresía

Junto con otros que se oponen al genocidio de Israel en Gaza, hemos sido acusados por Gove de azuzar la "división y el odio", y de amenazar los fundamentos mismos de la democracia británica. ¡Tremenda hipocresía!

Estas acusaciones  provienen del mismo gobierno Tory que ha sido el arquitecto de políticas racistas divisorias, como las deportaciones de refugiados a Ruanda y la creación de un "ambiente hostil" hacia los inmigrantes.

Es su gobierno el que está azuzando activamente una guerra cultural para distraer la atención de sus propios fracasos; fomentando el odio hacia los inmigrantes, los solicitantes de asilo y otras capas oprimidas de la sociedad.

Ministros como Gove afirman ser defensores de la libertad de expresión, protegiendo a Gran Bretaña de las "hordas" de comunistas y manifestantes. Sin embargo, es su gobierno el que ha atacado los derechos democráticos de libertad de expresión y reunión.

Son ellos los que han reprimido el derecho a la protesta con la Ley de Policía, Delincuencia, Sentencias y Tribunales, así como el derecho a la huelga con la Ley de Servicios Mínimos.

Camaradas del PCR, mientras tanto, han sido intimidados y detenidos por la policía en manifestaciones pro-Palestina con cargos falsos, que luego han sido retirados, sólo para impedirles marchar.

Y hemos sido calumniados de antisemitas violentos en periódicos burgueses como The Telegraph por presentar un programa revolucionario en el movimiento de solidaridad con Palestina.

¿Antisemitismo?

Las flagrantes calumnias de "antisemitismo" y las llamadas "marchas del odio" no son más que herramientas de la clase dirigente para atacar a los que se oponen al imperialismo y reprimir las libertades democráticas básicas.

El antisionismo no tiene absolutamente nada que ver con el antisemitismo. El genocidio que se está llevando a cabo contra los palestinos no es una política judía, sino que es la política del régimen israelí y del imperialismo occidental.

Muchas personas judías han participado en marchas y acampadas a favor de Palestina para expresar su oposición a este genocidio. Gove y el resto de los conservadores lo saben. Están mintiendo descaradamente.

Los conservadores están utilizando cínicamente la cuestión del antisemitismo como un balón de fútbol político, para adaptarse a su propia agenda imperialista.

En realidad, es su apoyo a la guerra de Netanyahu lo que alimenta la división y hace que el mundo sea menos seguro para los judíos.

Estas acusaciones son especialmente repugnantes viniendo del Partido Conservador, que tiene un largo y escandaloso historial de antisemitismo.

Signo de debilidad

Existe un profundo sentimiento de repulsa ante las acciones del imperialismo británico, tanto dentro como fuera del país. Millones de personas han salido a la calle semana tras semana para exigir el fin del genocidio.

Ahora, un movimiento explosivo de acampadas en universidades se ha extendido por todo el mundo, exigiendo que se rompan todos los lazos con la maquinaria de guerra israelí.

Estudiantes y trabajadores están hartos del apoyo del imperialismo británico al genocidio y han dejado claro que no están dispuestos a detenerse ante nada para combatirlo.

Esto es lo que teme el gobierno. Este movimiento hizo caer a la criminal de guerra Suella Braverman. Y ahora tiene el potencial de escalar y derribar a todo el gobierno conservador, junto con cualquier gobierno que continúe apoyando la bárbara guerra de Israel.

No es de extrañar que aumente el apoyo a la revolución y al comunismo, ya que millones de personas pueden ver cada día los horrores que crea el sistema capitalista, tanto en Gaza como en otros lugares.

Contraatacar

Toda la clase dirigente tiene las manos manchadas de sangre. Michael Gove, el resto del gobierno tory, junto a la leal oposición de Starmer: todos son criminales de guerra.

La brutalidad del genocidio de Israel se ha encontrado con una conspiración de silencio en la prensa patronal, que se limita a repetir como un loro la línea del imperialismo británico en su apoyo a la masacre, y a difamar a cualquiera que se atreva a oponerse a ella.

Los manifestantes palestinos, junto con los camaradas del PCR, han sido calumniados en la prensa como "antisemitas", como "incitadores a la violencia" y como "simpatizantes del terrorismo". Hasta ahora se ha hecho caso omiso de nuestras peticiones de respuesta a estas burdas calumnias.

Pero no nos silenciarán. Estamos decididos a contraatacar. Y tú puedes ayudarnos.

Para combatir las mentiras y calumnias de la clase dirigente y aprovechar al máximo la publicidad y la atención que estamos recibiendo, necesitamos emplear a un nuevo revolucionario a tiempo completo dedicado a los medios de comunicación y al trabajo de prensa.

Y necesitamos luchar contra la conspiración del silencio en la prensa patronal construyendo la prensa revolucionaria, que publicará y expondrá lo que el establishment no quiere que leas.

Por lo tanto, te instamos a que hagas una donación a nuestro fondo de lucha, establezcas una donación regular para ayudarnos a contratar más personal y te suscribas a The Communist (El Comunista). Con tu apoyo, podemos tener éxito.

Sobre todo, te pedimos que consideres unirte al Partido Comunista Revolucionario. Estamos construyendo una fuerza que puede derrocar a los belicistas de Westminster y al sistema capitalista asesino que defienden. Te instamos a que te unas a nosotros en esta tarea hoy mismo.




Join us

If you want more information about joining the IMT, fill in this form. We will get back to you as soon as possible.