Analisis

Se ha cumplido casi un mes desde el golpe al gobierno de Pedro Castillo. Un golpe orquestado por la CONFIEP, el aparato del estado burgués, el fujimorismo, las multinacionales mineras y la embajada de EE. UU. contra un presidente elegido democráticamente por el pueblo trabajador del Perú. 

El 7 de diciembre de 2022, el Estado chino publicó sus "Diez nuevas medidas", un apresurado cambio de su política de " COVID cero" a lo que denominó "contramedidas precisas". En realidad, se trataba de un abandono total de las anteriores medidas rígidas para contener el COVID-19. Según el régimen capitalista del PCCh, las 'Diez Medidas' tienen como objetivo mejorar la "precisión científica" en la lucha contra los brotes "de acuerdo con la situación de la pandemia y las mutaciones del virus".

Con el nombramiento de Rishi Sunak como primer ministro británico, los políticos y comentaristas de derecha han aprovechado la oportunidad para darse palmaditas en la espalda por ser parte de una sociedad tan moderna y progresista que tiene a un miembro de una minoría étnica como líder del país.

La montaña parió un ratón. Ayer el congreso peruano volvió a considerar la cuestión del adelanto electoral. A todas luces un sector de la clase dominante en Perú entiende que debe reformar el sistema político para tratar de aplacar la enorme ola de indignación que levantó el golpe congresual contra el presidente Castillo el 7 de diciembre.

El 28 de octubre, el presidente alemán y miembro del Partido Socialdemócrata (SPD), Frank-Walter Steinmeier, se dirigió a una serie de distinguidos invitados en el Palacio de Bellevue, su residencia oficial. En su discurso sobre el "Estado de la Nación", señaló que el mundo se "encaminaba hacia un período de confrontación" y que la "lucha por el poder" pasaba a primer plano.

Una tercera moción de vacancia [moción de censura] se había presentado contra Pedro Castillo y se discutiría el día 7 de diciembre, ante el Congreso. Sin embargo, a las 11:45 am Castillo dio un mensaje a la nación anunciando la disolución del parlamento, como respuesta ante los múltiples ataques y trabas que han puesto a su mandato desde el inicio.

En las últimas horas se ha acelerado la crisis política en Perú. El presidente Castillo decretó la clausura del Congreso, pero fue rápidamente detenido por la policía. El Congreso votó para acusarlo y proclamó a su vicepresidente como el nuevo presidente. ¿Qué significan estos acontecimientos?

El sábado 26 de noviembre  se convocó en Roma una manifestación nacional contra la violencia hacia las mujeres, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Posiblemente habría unas 10.000 personas en la manifestación, como máximo: muchas menos que las cerca de 100.000 de años anteriores. La manifestación fue convocada por el grupo activista de mujeres "Non una di meno" (Ni una menos).

Apenas un mes después del pomposo 20º Congreso del Partido del PCCh, la ira desde abajo está saliendo a la superficie. La semana pasada, la megafábrica de Foxconn en Zhengzhou, Henan, fue testigo de una confrontación violenta entre los trabajadores y la policía por el robo de salarios por parte de la gerencia, y en los últimos dos días, se han registrado protestas grandes y violentas en muchas ciudades importantes, dirigidas contra las medidas de confinamiento draconianas del régimen, que se han convertido en un foco de descontento generalizado. Como hemos predicho durante mucho tiempo, la profunda crisis del capitalismo chino está comenzando a impulsar a las masas a la acción.

Un millón doscientas mil personas inundaron las calles de la ciudad de México, según las cifras del gobierno de esta entidad. No parece un número exagerado. Gente de todo México, e incluso migrantes mexicanos residentes en Norteamérica, se concentraron en la capital del país ante la convocatoria de Andrés Manuel López Obrador de realizar una marcha al cumplirse 4 años de haber asumido la presidencia.